Cómo ahorrar en la factura de la luz: por qué voy a pagar más y como evitarlo.

En anteriores ocasiones ya hemos hablado de las ventajas de la iluminación LED y de cómo puede ayudarnos a ahorrar en nuestra factura de la luz. En efectoLED queremos que conozcáis las razones de la reciente subida del precio de la luz y entendáis cómo funciona y cuál es la evolución del mercado eléctrico.

Los costes de la energía eléctrica han alcanzado máximos históricos, lo que se traduce en un aumento significativo de la factura de la luz. Además según afirma Álvaro Nadal, ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, la tendencia actual no hace prever una mejora significativa de las condiciones del mercado, por lo que a final de año el coste medio de la generación de energía acabará rozando los 70€ megavatio/hora (MWh) lo que supondría pagar un 30% más en la factura de la luz. La ola de frio que azota Europa, la falta de lluvia y viento, y los “tejemanejes” de la industria petrolera (con encarecimientos “artificiales” de los precios incluidos), la cual controla la distribución del gas natural, han creado una especie de “tormenta perfecta” que se ciñe sobre nosotros.

¿Cómo se calcula el precio de la energía?

En España casi 12 millones de hogares están acogidos a la tarifa regulada (PVPC), en la que la parte variable de su factura se ajusta cada día y cada hora a los costes de la energía, según la producción y la demanda.

Además “gracias” al diseño institucional vigente, el precio final del MWh lo marca la tecnología más cara que entra en la mezcla para generar la energía. En este caso, la energía generada por las centrales nucleares, las cuales nunca se detienen, es la primera en entrar, seguida de la hidráulica y eólica, estas además a coste cero puesto que ya están más que amortizadas. Por hacer un inciso y completar una parte del “puzzle” de la subasta energética, debido al temporal, Francia ha tenido que detener algunas centrales nucleares, aumentando la demanda a las centrales españolas (otra fuente de energía barata que se nos va al limbo). Las siguientes tecnologías de generación en entrar a la mezcla, a precios siempre beneficiosos para los poderosos oligopolios de la energía, son el carbón y los ciclos combinados (gas natural) que son mucho más caras y sucias, y como hemos dicho antes, las que marcan el precio final.

Pero, ¿cómo afecta esto a mi factura de la luz?

El pasado año, el mercado cerró con un precio de 60€ (MWh). Durante el mes de enero se han batido día tras día todos los records, alcanzando el pasado 25 de enero un pico máximo de 101,99 €/MWh y un mínimo de 75 €/MWh (cota máxima desde Diciembre de 2013). Según la patronal eléctrica Unesa, estas subidas se traducirán en un aumento medio de  entre 8 y 9 € en la factura del consumidor final, aunque corrientes ajenas a la patronal auguran una subida mucho mayor. Con estos números y sin que se espere ningún “milagro atmosférico” en forma de lluvia y viento, a final de año podríamos llegar a pagar una media de 100€ más respecto a 2016.

Si tenemos contrata una tarifa regulada por el llamado mercado libre, estamos de enhorabuena, puesto que habremos contratado un precio fijo y la subida del coste de la energía no nos afecta. Pero cuidado! Nuestra compañía podría aumentar el coste de la tarifa en la próxima renovación del contrato, para ajustarse a la realidad del mercado (como se suele decir, “la banca nunca pierde”).

¿Qué puedo hacer para pagar menos?
Con las actuales subidas y las previsiones que hacen los expertos, necesitamos una formula para poder ahorrar en nuestra factura:

  • El primer paso sería revisar nuestro contrato con la compañía eléctrica, asegurándonos primero si la potencia contratada se ajusta a nuestras necesidades.
  • Lo siguiente sería contratar una tarifa con discriminación horaria. Tanto las tarifas reguladas como las de mercado libre (precio fijo) tienen disponible esta modalidad. Muchos usuarios no se deciden por esta opción porque no pueden asegurarse de la hora en la que van a consumir más o menos energía, pero datos indican que un hogar medio ahorra al año 70 euros con esta modalidad.
  • Un paso complementario al punto anterior, sería exigir la instalación de los nuevos contadores inteligentes por parte de las compañías. Con esto podríamos conocer al detalle nuestro consumo y asegurarnos de que nuestra tarifa es la correcta.
  • Por último optimizar al máximo la energía que consumimos. La iluminación LED, temporizadores horarios, electrodomésticos más eficientes, etc… suponen una inversión que a medio plazo va a compensarse con un significativo ahorro en nuestro consumo.

Con este panorama, ¿Todavía necesitas más razones para pasarte al LED y comenzar a ahorrar en tu factura?