Las bombillas G9 LED son tus aliadas en el ahorro energético, ya que permiten reemplazar tus halógenos convencionales igualando su potencia con un consumo hasta 10 veces menor. Por poner un ejemplo, ten presente que una bombilla G9 LED de unos 4 W (vatios) puede sustituir a una halógena de 40 W. Otra de sus bondades es que no requieren de transformador puesto que funcionan con una corriente de 220 y de 240 V (voltios). Igualmente, estas bombillas brindan un alto índice de reproducción cromática lo que asegura una iluminación sin distorsiones y, además, no se calientan, lo que las hace ideales para iluminar el interior de muebles como armarios y estanterías. Puedes seleccionar la temperatura de color que necesites entre blanco cálido, neutro o frío, o instalar modelos regulables que integran un triodo para corriente alterna o TRIAC. En nuestro catálogo encontrarás bombillas G9 de diferentes materiales como el cristal, el policarbonato o la resina epoxi. De la misma manera, puedes elegir entre potencias de 2,5 a 5 W con un grado de apertura de 360º para intensidades de 200 a 500 lm (lúmenes). Sumadas a todas estas ventajas, debemos añadir 2 más: se trata de bombillas con una vida útil de hasta 40.000 horas que están avaladas por la certificación CE y RoHS, así como por el marcado UKCA (UK Conformity Assessed).

¿Qué lámparas utilizan un casquillo de tipo G9?

El casquillo de tipo G9 alimenta lámparas muy eficientes y seguras, dado que no desprenden calor. Esto las hace ideales para espacios reducidos como estanterías, vitrinas, muebles, etc. Sin embargo, y tomando como base su bajo consumo y su tamaño reducido, los diseñadores de luminarias las están incorporando en lámparas colgantes y lámparas de techo consiguiendo efectos sorprendentes, así como una iluminación de gran calidad.

¿Qué ventajas ofrece el certificado RoHS de las bombillas G9 LED?

El certificado RoHS de nuestras bombillas G9, del inglés Restriction of Hazardous Substances, es una normativa europea que asegura que los productos que cuentan con ella han sido fabricados restringiendo el uso de materiales peligrosos para la salud y el medioambiente como pueden ser el plomo, mercurio, cadmio, cromo hexavalente, polibromados y éteres difenil polibromados.